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Nuestra guía paso a paso para cambiar el pañal a tu bebé fácilmente en cualquier circunstancia.

Antes de ser madre o padre, nunca habíais imaginado que el pañal pudiera generar tantas preguntas, ¿verdad? ¡Y has descubierto que es toda una aventura!

Pese a tener que cambiar a tu bebé hasta ocho veces al día, sigues teniendo un montón de preguntas sobre cómo cambiar el pañal. Entre posibles escapes, irritaciones o incluso dermatitis... ¡Te comprendemos!

Por eso, para acompañarte en el cambio de pañal, hemos preparado esta guía ¡para un cambio de pañal infalible!

Cómo cambiar al bebé en cuatro pasos:

Sigue este sencillo método para cambiar a tu bebé

1: Antes de empezar

Lo primero que debes hacer es asegurarte de que tienes todo a mano en el cambiador.

Revisa que todos los productos y accesorios que vayas a utilizar te queden al alcance de la mano para poderle prestar al bebé toda tu atención. Mantén siempre una mano sobre tu bebé para evitar que se dé la vuelta por sorpresa sobre el cambiador.

En cualquier cambiador debe haber:

  • una toalla sobre la que colocar al bebé,
  • toallitas reusables, discos de algodón o toallitas húmedas,
  • agua o loción limpiadora o Linimento (para saber más sobre el linimento, ve al final de este artículo),
  • pañales reutilizables o desechables,
  • crema para la zona del pañal,
  • spray para cambio de pañal en caso de irritaciones

Antes de cambiar

2: Operación «Culito limpio»

Con el bebé instalado cómodamente y de forma segura sobre la toalla, coge el producto de higiene elegido y empieza a limpiarle el culito desde la zona más limpia hacia la más sucia (de delante hacia atrás), para no arrastrar la suciedad.

Una imagen vale más que mil palabras: ¡mira nuestro vídeo tutorial al final de este artículo!

Limpiar antes del cambio

3: ¡Hora de secar!

Una vez tengas limpia la zona del pañal, sécala dándole suaves toquecitos con una toalla. Es importante prestar atención a los pliegues cutáneos y revisar que la piel esté bien seca.

También puedes dejar a tu bebé un rato con el culito al aire para que se seque de manera natural.

Este paso, secar bien la piel, es muy importante para prevenir la dermatitis del pañal..

Si detectas alguna rojez en la piel, aplícale al bebé crema para el cambio de pañal de forma generosa.

¿Te parece algo más que pequeñas rojeces? Lee nuestro artículo sobre dermatitis del pañal para ver si, en este caso, nuestro Spray Cambio de Pañal puede serte de ayuda.

Secar antes del cambio

4: ¡Misión cumplida!

Una vez tengas al bebé limpio y seco, puedes ponerle un nuevo pañal y ropa limpia. ¡Y ya está listo para nuevas aventuras… hasta el próximo cambio de pañal!

Cambio realizado

Consejo extra

El cambio de pañal puede ser un momento divertido

Ya que vas a tener que cambiar pañales sucios hasta ocho veces al día, ¿por qué no conviertes este momento en una ocasión para estrechar el vínculo con tu bebé?

Juega al cucú con una toalla, dale besitos en el cuello, hazle cosquillas o incluso dale un masaje. Confía en tu instinto, pero, sobre todo, ¡pruébalo! En el peor de los casos, a tu bebé no le gustará, pero, no te preocupes, te quedan muchos cambios de pañal más para probar otras opciones. Y, ¿quién sabe? Esta tarea común podría convertirse en un momento verdaderamente íntimo que compartes con tu bebé.

Cambiar al bebé fuera de casa

Antes de hacer una salida en familia, conviene preparar el kit de cambio de pañal para evitar sorpresas.

Lleva una bolsa con unos cuantos pañales, un linimento o toallitas húmedas desechables, que suelen facilitar la vida fuera de casa.

Lleva siempre contigo este kit, ¡para cambiar a tu bebé en un plis-plas en cualquier lugar!