¡Envío gratis a partir de 35 €!

Estamos en los meses más calurosos del año y los cuidados de tu recién nacido deben ser reforzados para evitar riesgos como un golpe de calor, deshidratación o picaduras de insectos.

Consejos para cuidar a tu bebé en verano

Los recién nacidos no toman agua, ya que su hidratación depende de su alimentación y siempre debe ser a demanda. Si estás con lactancia materna, notarás que tu bebé pedirá pecho en más ocasiones. Ofrécele siempre que te pida, tanto de día como de noche. Pueden ser tomas muy largas o cortas y muy frecuentes, dependiendo de las necesidades de sed y hambre que tenga. Si es lactancia artificial, ofrécesela también a demanda. Los recién nacidos no necesitan agua, ni infusiones a no ser que tu pediatra te lo indique expresamente.

¿Cómo vestirlo?

Cuando la temperatura es elevada, los recién nacidos no necesitan más ropa que los adultos, por lo que no le abrigues en exceso. Hay que evitar que sufran un golpe de calor, que es el principal riesgo en verano. Deberás estar pendiente de su temperatura, y si ésta es superior a los 38º, debes hidratarlo, darle un baño de agua siempre templada y acudir al pediatra lo antes posible.

Si hace mucho calor, es suficiente con que lleve un body o camisita de algodón o hilo, que son transpirable e hipoalergénicas. Recuerda lavarlas con un detergente para bebés y no utilizar nunca suavizante ni lejía. Hasta que no camine no es necesario que lleve zapatos.

Además, te aconsejamos que lleves contigo una sabanita o arrullo por si cambia la temperatura para poder taparlo, así como un recambio de la sábana bajera del carrito para cambiarla si se moja de sudor.

Si estás en casa, procura que la temperatura ambiental esté entre 22 y 25 ºC. No lo dejes expuesto a corrientes de aire, ventiladores o aire acondicionado y por las noches tápalo con una sábana ligera. También deberás comprobar frecuentemente signos de sobrecalentamiento como piel sudorosa, letargo o excesiva agitación.

¿Cómo cuidar su piel?

La piel del recién nacido es muy delicada, por lo que debes usar solo productos adecuados a su edad. No debes exponerlo a la luz del sol directamente hasta los seis meses de edad. El mejor cuidado es mantenerlo siempre en la sombra y, aunque no se exponga al bebé directamente al sol, también puedes proteger su piel con un protector solar específico para él.

Picaduras de insectos

En verano es época de mosquitos y de otros insectos. Algunas picaduras pueden ser peligrosas para los bebés. Protege su cuna y su carro con una mosquitera. Existen pulseras antimosquitos para llevar en el carro o cuna. También hay aplicaciones para móviles que emiten sonidos que los ahuyentan. No apliques nunca directamente sobre su piel lociones repelentes, ya que no son adecuados a su delicada piel.

Recuerda que en los meses de verano lo más importante es que tu bebé esté hidratado, no exponerlo directamente al sol y no abrigarle en exceso. De todos modos, si tienes cualquier duda, no tengas miedo o vergüenza en consultarnos.